La obsesión de Perandones contra la hostelería de Astorga hace recordar viejos tiempos dictatoriales
¿Qué un alcalde de un municipio leonés quiere ser un «pequeño caudillo»? Pues nos tocó a Astorga.
El alcalde del PSOE de Astorga, con el apoyo de quien dijo que iba a mirar por la ciudad pero solo mira por su sueldazo de teniente de alcalde Chema Jáñez, de PODEMOS-IU, cree que seguimos en la época de su anterior mandato cuando hacía lo que le daba la gana, como él mismo ha reconocido.
Tal es así, que en una entrevista en la 8 León llegó a admitir que ahora las cosas están más complicadas en la hacienda municipal porque hay leyes que le controlan dónde y cómo gastar el dinero municipal: claro, ahora ya no puede hacer lo que le dé la gana como si la ciudad fuera suya.
El señor Perandones no quiere enterarse de que las cosas ya no son como antes, como bien afirmó en dicha entrevista: todos han evolucionado menos usted que se cree que esta ciudad es suya y solo suya.
No le ha llegado con vetar a quien no piensa como él y a quien le lleva la contraria: ahora va, descaradamente, a por el sector principal de ingresos de la ciudad: la Hostelería.
Tanto es así que ha sido el único que ha usado la ley para creerse, una vez más, el dueño de la ciudad para cerrar locales hosteleros, siendo el único en la provincia que así ha visto la ley.
Pero lo peor no es eso: lo peor es su cobardía, ya que para colmo, según informa el Faro Astorgano en una entrevista realizada a Perandones, culpa de sus ansias de poder a nada menos que la Policía Municipal por un supuesto informe. Señor Perandones: aunque ese informe existiera, cosa que todos dudamos debido a la multitud de mentiras, es decisión de usted el fastidiar a los hosteleros o de hacer como en comunidades como Extremadura, donde han dado licencias temporales para que los locales hosteleros no cierren salvo a la hora acordada por el gobierno.
Este ego y ansia de poder solo se puede traducir en pérdidas para la ya maltrecha economía astorgana, ya que en esta ocasión dejará en la calle a unas 20 personas en empleos directos de esos hosteleros a los que mandó cerrar, curiosamente, siendo los hosteleros uno de los sectores qué más cumplen las normas “post covid”: mesas a distancia de seguridad, aforo limitado, etc.
Pero hay algo más grave aún, si cabe, que pudiera llegar a ser incluso constitutivo de delito de prevaricación, y es que uno de los locales hosteleros que ha ordenado cerrar no tiene la correspondiente licencia de “bar especial” ya que la está tramitando, siendo actualmente su licencia de Café Bar, por tanto, no estaría incluido en la norma sacada por el gobierno que se ha tomado tan a rajatabla.
Todo esto, claro está, con el amparo de Chema Jáñez, quien prefiere seguir callado con su sueldazo de 2.760 euros en 14 pagas, no vaya a ser que le lleve la contraria al “pequeño caudillo” y se le acabe el sueldazo.
A continuación, se puede ver la entrevista de la 8 León donde afirma que ahora la ley de Hacienda le entorpece… ¡Qué tiempos aquéllos donde campaba a sus anchas, eh Perandones! Ahora tiene que cumplir la ley, esto ya no es su pequeño reino: